Las sesiones que ofrecemos se realizan desde un enfoque transpersonal, el cual es un enfoque integral y holístico que explora el mundo profundo de la psique y la relación entre el ser humano y el cosmos.
La terapia transpersonal tiene como objetivo apoyar a las personas que están atravesando un proceso de transformación y evolución, a quienes tienen la necesidad de explorar, conocer e integrar procesos y eventos que trascienden el sentido de identidad habitual, y a quienes buscan una experiencia de unidad. interconectividad y expansión de la conciencia, personas que desean experimentar una realidad con más sentido.
La psicoterapia transpersonal enfoca su interés en la dinámica de la transformación humana, en el proceso de evolución psicoespiritual, en el proceso de individuación, en la autorrealización y en otras formas de crecimiento transformador. En este sentido, ofrecemos consejos para que la persona pueda vivir su propio proceso de autorrealización psicológica, lo cual le conducirá al descubrimiento y desarrollo de su propio potencial; asimismo, brindamos apoyo para que cada persona pueda desarrollar una visión filosófica del mundo y de la realidad y del cosmos, permitiéndole encontrar más significado a su propia existencia. Nuestro trabajo es brindar consejo y orientación en este proceso de crecimiento interior o evolución personal, aunque el verdadero trabajo de transformación y desarrollo depende del compromiso y disciplina de cada uno.
Durante el transcurso de las sesiones te recomendaremos prácticas y ejercicios que te permitirán mantenerte en constante entrenamiento psicoespiritual. Y juntos exploraremos tus vivencias de carácter transpersonal, es decir, experiencias cumbres o místicas, experiencias de estados expandidos de conciencia adquiridos a través de la práctica de la introspección profunda o meditación y experiencias logradas gracias al uso de sustancias psicodélicas u otras técnicas de exploración.
Roberto Assagioli fue un psiquiatra y pensador italiano. Utilizó el término psicosíntesis por primera vez en 1926, para referirse a un método o enfoque psicoterapéutico cuya principal motivación era organizar la personalidad en torno a un centro unificador. Desde entonces, Assagioli dedicó su vida a seguir construyendo y perfeccionando este método. Siempre estuvo interesado en la investigación del mundo espiritual. Era un practicante de la meditación y estaba familiarizado con la espiritualidad oriental, diversas corrientes espirituales de Occidente y el pensamiento filosófico clásico y moderno.
A través de la psicosíntesis es posible encontrar un camino de autoconocimiento y transformación que nos permita integrar y sublimar aspectos inferiores de nuestra personalidad conocidos como subpersonalidades, que normalmente se encuentran en conflicto y, en general, no somos conscientes de ellos. Además, la psicosíntesis permite el uso de diversas técnicas y procedimientos que tienen como objetivo promover la integración de la personalidad, buscando el desarrollo del ser humano de forma dinámica, armoniosa y progresiva. Lo interesante de la psicosíntesis es su dinamismo y capacidad para integrar diferentes concepciones y métodos empíricos, existenciales, humanistas y transpersonales. En la psicosíntesis el objetivo es una unidad orgánica y armoniosa de todos los aspectos del ser humano a través de una ley general de síntesis interindividual y cósmica. El método busca la curación psicológica a través de la reconciliación de tendencias internas; busca la unificación de lo inferior con lo superior, y la utilización y sublimación de las energías inferiores. Obviamente, es un proceso de autorrealización que busca armonizar todas las funciones psicológicas y desarrollar la potencialidad humana en todos los niveles de la constitución psicológica. Esta autorrealización trata de establecer una conexión con el verdadero centro de la personalidad o de sí misma, pasando por etapas sucesivas, encaminándose hacia la luz, hacia la perfección, hacia el sol interior; en la búsqueda de la unificación de la personalidad.
Un aspecto muy importante de la psicosíntesis corresponde al desarrollo de la voluntad, que adquiere un lugar preeminente, convirtiéndose en elemento central y expresión directa del Yo. El desarrollo de la voluntad es un proceso que pasa por diferentes etapas, llegando a la identificación de la voluntad transpersonal con la esencia del ser, una voluntad capaz de aprender a observar, dirigir y armonizar todas las funciones psicológicas. Esta autoidentificación es sumamente importante, ya que, como menciona Assagioli:
“Identificarse continuamente con una función o con un elemento predominante muchas veces, y casi inevitablemente, conduce a una situación de vida precaria, que tarde o temprano se traduce en un sentimiento de pérdida, incluso de desesperación, como es el caso del deportista que envejece y pierde su fuerza física; de la actriz cuya belleza física se desvanece; de la madre que se queda sola cuando los hijos crecen; o el estudiante que debe dejar la escuela y enfrentar un nuevo tipo de responsabilidad. Estas situaciones pueden derivar en crisis graves y en ocasiones muy dolorosas, que pueden considerarse como muertes psicológicas más o menos parciales. Aferrarse desesperadamente a la vieja identidad en decadencia es inútil. La verdadera solución solo puede ser un renacimiento, es decir, entrar en una identificación nueva y más amplia. A veces, esto involucra a toda la personalidad y requiere un despertar o un nacimiento a un estado de ser nuevo y superior. El proceso de muerte y renacimiento ha sido expresado simbólicamente en diferentes misterios, y ha sido vivido y descrito en términos religiosos por muchos místicos. Actualmente se está redescubriendo en términos de experiencias y logros transpersonales ”.
